Es de prudentes dedicar una parte de los ingresos al ahorro, porque nunca se sabe que puede pasar... Pero hoy en día, con una inflación del 10% en junio y, que apunta a que va a seguir al alza en los próximos meses, nuestra renta disponible se reduce semana a semana. Lo vemos cuando vamos al súper mercado, en la gasolinera, en los suministros, etc. Por lo tanto, ahorrar se ha vuelto prácticamente una misión imposible.
Yo intento seguir unas rutinas que me ayudan a ahorrar: poner la lavadora y lavavajillas en horas de consumo "valle" como el fin de semana o a partir 10 noche e intentar que estén bien repletos; utilizar más el transporte público y dejar el coche en casa; comprar alimentos básicos y de temporada y buscar recetas apetecibles y originales que sorprendan a la familia con un bajo coste; dejar las persianas medio bajadas para evitar que se caldee en exceso el ambiente, con ello ganaremos frescura y evitaremos poner el aire acondicionado, al menos no tantas horas, etc. Son pequeñas acciones que benefician al ahorro en la economía familiar, ahora y siempre.