Los talones agrietados son un problema común que puede causar molestias y dar vergüenza, especialmente cuando llega el verano. La piel seca, la falta de humedad, el uso constante de calzado abierto y la falta de cuidado adecuado del pie pueden contribuir a que los talones se vayan secando y endureciendo y acaban agrietándose. Por suerte, no todo está perdido, y con los cuidados adecuados, es posible mejorar la condición de los talones y recuperar su suavidad y buen aspecto. ¿Cómo? Te contamos los tres consejos más efectivos para tratar los talones agrietados a continuación:
La hidratación es clave para mantener la piel suave y flexible, y esto es especialmente importante para los talones agrietados. Para ello, puedes ayudarte de un gel de ducha hidratante, como el gel de ducha con sales minerales de La Toja, que restaurará la humedad perdida en la piel y suavizará las grietas. Una vez salgas de la ducha, aplica una crema hidratante especialmente formulada para tratar la sequedad en la piel y las grietas en los talones. Este tipo de productos hidratantes suelen contener ingredientes como la urea, el ácido láctico o la manteca de karité, que son conocidos por sus propiedades hidratantes y suavizantes para los talones.
El truco está en aplicar la crema hidratante en los talones justo después de ducharte, momento en el que la piel está limpia y húmeda aún. Esto ayudará a sellar la humedad en la piel y a maximizar los efectos del producto. Además, no te olvides de ponerte unos calcetines de algodón después de ponerte la crema, para mantener la humedad mientras los ingredientes activos van penetrando mejor en la piel durante la noche.
La exfoliación de los talones es clave. ¿Sabías que si no se exfolia regularmente la piel de los talones, las células muertas de la piel tienden a acumularse, formando una capa gruesa y áspera? Pues es justamente esa acumulación de piel muerta en los talones la que puede empeorar la apariencia de las grietas y dificultar la absorción de la crema hidratante. ¿La solución? exfoliar suavemente los talones regularmente para eliminar esta piel muerta y promover la regeneración celular.
Existen diferentes herramientas que te ayudarán a exfoliar los talones, desde las famosas piedras pómez hasta exfoliantes suaves caseras con ingredientes naturales como el aceite de coco o el azúcar.
Independientemente del método que decidas usar para exfoliar tus talones, una vez hayas acabado es importante enjuagar bien los pies con agua tibia y secarlos con una toalla suave.
Además, aunque se recomienda una exfoliación regular, esto no quiere decir que se pueda realizar a diario, ya que una exfoliación excesiva puede llegar a irritar la piel.
El consejo es exfoliar tus pies una o dos veces por semana, aplicando siempre nuestro primer consejo: hidratación profunda del pie para mantener la piel suave y flexible.
Aunque suelen ser más comunes durante el verano, los talones agrietados no son solo un problema estacional y pueden ocurrir durante todo el año ya sea por el uso constante de calzado abierto o por la exposición al aire seco y frío en invierno. Por lo tanto, además de hidratar los pies y exfoliarlos a menudo, es importante proteger y cuidar los talones durante todo el año para prevenir la sequedad y esas molestas grietas. Te contamos cómo:
● Durante los meses más cálidos, usa sandalias o zapatos abiertos que brinden suficiente soporte pero permitan que los pies respiren. Además, si tus talones están expuestos al sol, aplica protector solar para proteger la piel del daño causado por los rayos UV.
● En los meses más fríos, usa calcetines gruesos y zapatos cerrados para mantener los pies abrigados y protegidos del frío y sobre todo de la humedad. Intenta también evitar baños o duchas demasiado calientes de manera prolongada ya que pueden eliminar los aceites naturales de la piel y empeorar la sequedad de la piel.
● Durante todo el año: cuida de tu piel bebiendo suficiente agua en tu día a día, apúntate a rutinas de cuidado con numerosos beneficios como el dry brushing, o el famoso beauty snacking.
Recuerda ser constante en tu rutina de cuidado y consultar a un dermatólogo si experimentas problemas severos o persistentes en la piel de los pies o aprender a elegir mejor el gel de ducha. Con paciencia y dedicación, podrás disfrutar de unos talones suaves y bonitos en poco tiempo.
Si también te preocupa la salud de tu pelo, te contamos cómo hidratar el pelo seco en casa.
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