Peinados para verse más joven: ideas frescas que restan años

No es magia, es estrategia: los peinados que rejuvenecen suelen tener movimiento, volumen natural y un acabado relajado. Nada demasiado rígido ni extremadamente estructurado. El truco está en suavizar las facciones y añadir un aire desenfadado, como si te hubieras peinado sin esfuerzo… pero con muy buen gusto.

El bob  es ese corte que nunca pasa de moda y siempre rejuvenece. Pero cuando le añades capas suaves, el resultado es aún mejor: el movimiento que aporta afina el rostro, da volumen donde lo necesitas y suaviza las facciones. Es perfecto si buscas un peinado para verte más joven a los 40 o más, porque tiene ese aire fresco y desenfadado que quita años.

¿Prefieres no llevarlo tan corto? Entonces el long bob (o “lob”) puede ser tu mejor opción. Llega justo a la altura de los hombros o un poco más abajo, y combina lo mejor de los dos mundos: comodidad y estilo, sin renunciar al largo. Es versátil, fácil de peinar y queda bien tanto liso como con ondas suaves. Un acierto total si buscas un cambio sin arriesgar demasiado.

Para definir bien tus ondas tipo 2c sin apelmazarlas, prueba productos ligeros como sprays o geles suaves. Uno que puede irte genial es el spray gotCurlz Define & Protect de got2b, que ayuda a definir tus ondas mientras las protege del calor y del encrespamiento. También puedes echar un vistazo a la línea Intense Rizos de Syoss, pensada para nutrir y definir ondas y rizos sin dejarlos pesados.

Las ondas naturales tienen un efecto mágico: suavizan los rasgos, dan volumen y aportan un aire desenfadado que automáticamente rejuvenece. ¿La razón? Rompen con la rigidez, hacen que la melena se vea más viva y enmarcan el rostro con movimiento y frescura. Es ese estilo que transmite vitalidad sin esfuerzo.

Lo mejor es que puedes lograrlas de mil formas: con una plancha, con un rizador  o incluso sin calor, usando técnicas como trenzas o moños húmedos. Elige la opción que mejor se adapte a tu rutina y tipo de pelo.

Los flequillos tipo “curtain” o desfilados  en los laterales son un truco infalible para quitarte años de encima. Ayudan a suavizar la expresión, disimular líneas de la frente y centran la atención en los ojos, dándole al rostro un aire más fresco y relajado.

La clave está en evitar cortes rectos y pesados, que pueden endurecer las facciones. En su lugar, apuesta por versiones más ligeras y abiertas, que se fundan con el resto del cabello y aporten movimiento. Funcionan genial tanto con melenas sueltas como recogidas.

Este peinado tiene un efecto lifting inmediato: al recoger el cabello en la parte superior, se elevan ópticamente los rasgos y el rostro se ve más despejado y firme. Además, aporta un aire fresco y juvenil, casi juguetón, que rejuvenece al instante.

La media coleta alta es perfecta si buscas peinados que te hacen lucir más joven con muy poco esfuerzo. ¿Un truco extra? Deja unos mechones sueltos a los lados para suavizar la expresión y darle un toque informal al look.

Mientras que una media coleta alta aporta ese efecto lifting inmediato al elevar los rasgos, un recogido bajo y relajado juega con otro tipo de encanto: suaviza las facciones y da un aire romántico y desenfadado. Evita los peinados muy tirantes y apuesta por dejar algunos mechones sueltos en los laterales. Así enmarcas el rostro y logras un look natural, elegante y rejuvenecedor, ideal para ocasiones especiales sin parecer demasiado arreglada.

Si te gusta llevar el pelo largo, no renuncies a él: solo asegúrate de que tenga forma. Las capas largas  son una gran aliada, ya que aportan movimiento, evitan el efecto “tabla” y dan volumen sin perder el largo. Además, favorecen mucho porque suavizan el rostro y permiten peinados con más vida. Son súper versátiles: puedes llevarlas sueltas al natural, en una coleta informal, con ondas suaves o incluso con un semirrecogido según el plan que tengas ese día.

Si hay algo que rejuvenece al instante, es el volumen en la raíz. Cuando el pelo está muy pegado al cuero cabelludo, puede hacer que la cara se vea más seria o apagada. En cambio, levantar un poco la raíz da ese efecto fresco, favorecedor y con más movimiento. ¿La buena noticia? Es facilísimo de lograr: basta con secarte el pelo boca abajo , usar un producto texturizante o darle un toque con los dedos. Ese pequeño gesto puede cambiarlo todo.

Además del corte o peinado, hay muchos detalles que pueden ayudarte a quitarte años de encima. Uno de los más importantes es el brillo del cabello: una melena hidratada, con movimiento y luz, rejuvenece al instante. Para conseguirlo, lo más importante es mantenerlo bien hidratado. Usa champús y mascarillas nutritivas y no te olvides de aplicar un sérum o un aceite capilar en las puntas: unas gotitas pueden hacer maravillas.

Una buena opción es la gama de cuidado capilar Gliss, que tiene productos específicos para nutrir, reparar y darle ese brillo saludable a tu pelo.

El color del pelo puede hacer una gran diferencia cuando se trata de verte más joven. Los tonos cálidos y naturales —como el castaño claro, el miel o el avellana— suavizan las facciones y dan un toque de luz al rostro. ¿No quieres un cambio radical? No pasa nada: unos reflejos sutiles tipo babylights o un toque de balayage ya pueden iluminar tu melena sin complicaciones.

La gama Palette de Schwarzkopf tiene un montón de opciones con tonos naturales y modernos que cubren bien y dejan el cabello con un aspecto brillante y sano. Ideal para darle un aire fresco a tu look sin salir del baño.

Y recuerda que a veces los pequeños cambios hacen magia. Cambiar la raya de lado, añadir un accesorio actual o probar con un flequillo suave pueden refrescar tu look sin necesidad de un gran cambio. Lo importante es que el resultado te haga sentir bien y refleje tu personalidad.